Las condiciones en el borde del Sistema Solar están en constante cambio, según los indicios recogidos por el observatorio IBEX de la NASA , situado en órbita de la Tierra. El satélite ha terminado, al cabo de seis meses de observaciones, un nuevo conjunto de mapas completos de la interacción del Sistema Solar con la galaxia, lo que permite a los investigadores seguir estudiando la zona que separa el medio local interestelar de nuestra heliosfera, una burbuja protectora que actúa de escudo. Las misiones futuras se beneficiarán, tanto en su diseño como en la fijación de objetivos, de una mejor comprensión de los cambios en esta frontera espacial, señalan los expertos.
Via/ ElPaís